David J. Goldberg y Susan Bard, Dermatología, Nueva York, NY
Dermatología estética vol. 1, Karger 2014.
El láser Nd:YAG, con su longitud de onda de 1064 nm, es un pilar para el tratamiento de lesiones vasculares. Lo que puede sacrificar en absorción por la hemoglobina, lo compensa en profundidad de penetración. El láser Nd:YAG de pulso largo ha sido la opción ideal para lesiones fuera de la cara y para objetivos vasculares gruesos o profundos, aunque los dispositivos más nuevos de alta energía de pulso corto (650 microsegundos) también demuestran una alta eficacia y seguridad en los vasos faciales. Los usos comunes incluyen venas de las piernas, manchas de vino de Oporto, vasos azules y lagos venosos. El láser Nd:YAG ofrece una longitud de onda versátil con muchos usos posibles tanto para indicaciones pigmentadas como vasculares.
